EL AJEDREZ DE URIBE

Yo le admiro mucho al uribismo la capacidad que ha tenido en apenas 8 años de construir una nueva política, un nuevo pensamiento, una nueva moral. Mas de una vez he constatado que al uribista promedio le interesa mucho hablar del Arte del Guerra y sacan del bolsillo del pantalón una edición del libro de Sun Tzu. Hablan con toda tranquilidad del ajedrez humano. A mi me traen imagenes muy hermosas de un pasado reciente, me imagino que Uribe juega ajedrez usando a personas como fichas, lo puedo ver con su bigote moscay acariciando orgulloso la Esvástica que porta en su brazo. Es una imagen muy viva, los peones siendo azotados por sóldados romanos y llevando en sus pechos la infamia de las cadenas. Ellos son los primeros que caerán.
Es sabido que en toda guerra civil cuando se conmemora una fecha el conflicto se agudiza ya que alguna de las partes va a querer llegar fuerte a una posible negociación. Previendo esto Uribe saca a los funcionarios de menor rango, esos que no tienen importancia para su gobierno eterno, la gente que se preocupa por resolver los conflictos, los que hablan de paz, esos molestos moscardones que si fuera por él serían aplastados como cucarachas pero que los mantiene y los mantendrá en sus proximos cuatro años de mandato para revestir a su gobierno del dudoso cartelito democrático. Uno de esos peones era Mónica Duarte y sus compañeras. San Juancito corregimiento de Teorama, por Dios yo soy de Cúcuta y desde pequeño me asustaban con que iba a pasar una temporada allá si no aprobaba todas las materias. Teorama es una de las pocas zonas donde el Ejercito de Liberación Nacional todavía tiene amplio dominio hasta el punto de decir que son casi inexpugnables. Allí fueron a una misión humanitaria solas en un transporte urbano que por lo general ya es inhumano hacer un viaje por el departamento en esas condiciones y además tener que despues hacer dos horas en moto hasta San Juancito. Solo una muestra mas de como explota este gobierno a los funcionarios dedicados a lo que se pregona debería ser el fin máximo: La paz.
Su familia, amigos cercanos como Carlos Castro o Milena Corzo, su novio Luis Carlos Valdés todos se sienten como en una película de Costa-Gavras llendo de un lado para el otro hablando con funcionarios infames tratando de pedir una explicación, una respuesta algo que los tranquilice porque no puede ser que el secuestro se haya perpetrado el sábado 10 de julio y solo hasta el martes 13 hayan reportado la noticia, ¿Que querían los de la vicepresidencia hacerse los de la vista gorda? ¿Que pretendía guardar la basura debajo de la alfombra?. Igual los funcionarios solo juegan el ajedrez de Uribe donde la vida de un peón debe ser sacrificada en aras de la victoria final y como en la célebre novela de Orwell la guerra es un invento, la guerra es entre nosotros mismo y la única que pierde es Colombia y nosotros sus infelices hijos.
Exigimos una respuesta clara, no me vengan hablar de que no hay que doblegarse ni nada de esa mierda paramilitar, acá hay que sentarse a negociar escuchar que es lo que quieren y que entreguen con vida a mi amiga y que toda la comunidad se entere de lo que esté pasando asi a la asquerosa comunidad publica colombiana le importe una mierda lo que pasa con la vida de una persona