28 de septiembre de 2011
EL HOMBRE Y SU MACHETE
Un hombre con un machete dirige una Big Band. Cada golpe al tambor es como la explosión de una bomba, las bombas que resuenan en la cordillera, corta el aire el hombre que siempre tuvo una cabeza de burro, Tanatos en chaqueta de cuero cortando cabezas imaginarias. En el ambiente flotando la música más extraña y única que hemos sentidos nosotros los pobres asistentes a este espectáculo sangriento que significa vivir en Colombia. Mientras muchos tratan de ser locos con propuestas estrafalarias Edson Velandia consigue plasmar la tétrica realidad colombiana dirigiendo a una banda de jazz con un machete. El salpullido no tardó en salir, los que creen que desde la academia se puede entender el jazz saltaron como tumba ranchos en navidad a decir que cualquier jazzuquero puede tocar en el Jorge Eliecer Gaitán. Es difícil seguirle el paso a Velandia, su rebeldía lo obliga a vivir en continuo cambio, su música lo gobierna, es su dueño y lo obliga a cortarse la cabeza dos veces por año.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario