5 de noviembre de 2012

SKYFALL DE SAM MENDES. Las aventuras del sicario de la reina.


Nunca he sido un fan de las películas de 007, la verdad lo que siempre empieza con el gozo de participar en un ritual pagano compuesto de chicas lindas, martinis y Aston Martins empieza después de la primera hora a tornarse en algo completamente aburridor. Anoche justamente después de ver Skyfall me puse a pensar en las razones por las cuales no soportaba al seductor espía. Creo que todo reside en su brutal y sincero fascismo, exacerbado en esta última entrega.
Me voy a contradecir porque desde estas páginas defendimos con ahínco algo tan facho como Iron Man y Los vengadores tal vez porque la intención política de sus guionistas habitaba en el subtexto, en la interpretación que uno le pudiera dar al filme. Acá no, acá los malos son esos demócratas que consideran un anacronismo mantener ese monstruo sobreviviente de la guerra fría que son los agentes que como Bond disparan y después preguntan.

Sean Connery podía ser un tipo simpático porque iba y combatía al Doctor No en la época de la ideología, tenía cierta gracia escocesa, cierto humor. También hay que abonarle que es un actor extraordinario. Lo que exaspera de Daniel Craig es su oscuridad. Sam Mendes ha repetido una y otra vez que se inspiró en el Batman de Nolan para crear su Bond. El aura tenebroso que le imprime a Bruce Wayne y gran Cristhian Bale es completamente justificado, atributos que definitivamente no debería tener Craig para encarnar al espía más seductor del mundo. Muchos se alegran porque este Bond tiene problemas de hombre común y corriente, es un alcohólico y un adicto confeso al asesinato. Las chicas, hay que decirlo, ya no se derriten como antes cuando él apuesta todo al rojo en la ruleta. Es un hombre que ya ni siquiera tiene buena puntería, que no es capaz si quiera de pasar las pruebas para acreditarlo como un agente de Su Majestad. Sin embargo con lo poco que le quede a su avasallante personalidad le será suficiente para derrotar a los malos
.
Pero sería absolutamente irresponsable de mi parte decirles que Skyfall no es una película digna de verse. Las persecuciones son trepidantes, sobre todo la del principio, sobre el techo de un mercado turco dos sicarios en una moto se entrelazan en singular tiroteo, en un espectacular casino ubicado en la mitad de un lago en Shangai lleno de luces y dragones de Comodo que pelean entre si Bond da buena cuenta de dos malos. Son realmente notables la manera como está fotografiada la película y sobre todo el sonido que seguramente ganará un Óscar a principios de primavera.

Los fanáticos de 007 la pasarán de maravilla y de verdad que no es para menos. El agente cumple 50 años y por eso han pensando en hacer una película que recuerde los orígenes. Vuelve el Aston Martins, el casino y el Martini, eso sí las chicas Bond ya no serán tan tontas. Adele consiguió hacer una canción típica de la serie, llena de sensualidad y elegancia y los créditos del principio están sencillamente maravillosos. El malo está a la altura de las circunstancias y por eso pensaron en un tipo como Javier Barden quien vive su carrera a punta de retos que nunca jamás le han quedado grandes. 

Además buscaron a un tipo como Sam Mendes a quien Hollywood ya le ha recordado que no siempre puedes hacer películas deprimentes como Revolutionary Road y que de vez en cuando debes pagar tributo a la industria si quieres tener unos cuantos millones (no muchos) para hacer tu película personal. Se nota la intención por parte de los productores de hacer una especie de nolacización de James Bond esperando los buenos resultados a nivel de crítica y taquilla que ha tenido con Batman.
A mí en lo particular me durmió por momentos, me pareció excesivamente larga y reafirmó la animadversión que siento ante este sicario contratado por la reina. Los que no tengan estos prejuicios van a vivir más de dos horas de acción y emoción al límite.  Saldrán con ganas de tomarse un Martini y de asesinar malos. Seguro que si.

1 comentario:

xervantex dijo...

Los pecados del 007 de no creer:
1. El traje no se le arruga
2. Casi no se ríe
3. No hay mujer que se le resiste
4. La secretaria vive obsesionada
5. La reina no envejece
6. No necesita navaja suiza
7. Todo es explosivo
8. Nunca le piden la licencia para matar
9. No se reproduce ni muere
10. Con la reina tiene su guardado como Cristobal Colón