En el mundial de Inglaterra, Corea del Norte propinó una de las derrotas mas duras que haya podido sufrir selección italiana alguna. Este equipo semiprofesional acabó con las ilusiones de la Azurra clasificándose historicamente para los Cuartos de Final de la competición. En esa instancia se enfrentó con la Portugal del estelar Eusebio. Cansado, reventado pero con mucho amor propio el equipo coreano cayó sin atenuantes. Sin embargo quedar entre los ocho mejores del mundo era una hazaña sin precedentes, imaginense no más lo que hubiera sucedido en Colombia, seguramente todavía estuvieramos borrachos de felicidad.
Pero al llegar a P'yongyang en vez de una multitud esperaba al plantel en el aeropuerto un batallón de soldados. Una vez pisaron suelo coreano fueron detenidos y obligados a cumplir la absurda condena de tres meses en la cárcel y trabajos forzados por haber deshonrado a la patria. Le estaban cobrando el seis a tres contra Portugal.
Cuarenta y cuatro años después Corea del Norte vuelve a clasificarse a un mundial. El humilde equipo coreano logró empatar a cero goles con Arabia Saudita y clasificaron contra todo pronóstico a Surafrica.
A pesar de su flatulento aspecto Kim Il Sung II es un hombre culto, apasionado de los grandes novelistas occidentales y un cinéfilo empedernido. Dicen que posee la colección privada de películas en 35 mm más grande de Asia. Cuando se aburre del dulce contoneo de Ava Gardner sale al balcón de su palacio Presidencial y pone a marchar a sus tropas, además le encanta ver en movimiento sus relucientes y cada vez mas numerosos cascos nucleares. Asi que para este hombre tan delicado, tan cultito el fútbol no es mas que una odiosa droga que embrutece a su pueblo. Por eso prohibió terminantemente que se transmitieran para su país los partidos que Corea del Norte jugaría en el mundial.
Era casi seguro que la esforzada selección solo jugara los tres partidos de primera ronda. El sorteo fue inclemente ya que compartió grupo con Brasil, Portugal y Costa de Marfil. Si bien en el debut contra los pentacampeones fue bastante digno (Perdiendo 2-1) fueron goleados por los lusos (7-0) y Marfileños (3-0).
Llegaron a P'yongyang conociendo el antecedente de 1966. Efectivamente las represalias no se esperarían. A la totalidad del plantel se le obligó a permanecer en posición de firmes durante doce horas mirando el horrible edificio donde subyace la casa de la cultura. Al entrenador del equipo no le fue mejor ya que fue condenado a un año de trabajos forzados. El cargo por el que fueron acusados fue el de ofender la dignidad y tranquilidad del maximo dirigente del partido del partido comunista y padre de la patria el gran Kim Il Sung II que, sin saber muy bien que pasaba, reposaba de su quimioterapia escuchando por enésima vez la delicada voz de Rita Hayworth.
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